La titular de la SMADS, Mónica Vega, hizo énfasis en que la quema de fuegos artificiales solo trae consecuencias que afectan la salud de personas en condición de vulnerabilidad como quienes padecen enfermedades pulmonares, autismo, niñas y niños y personas mayores, debido a los altos índices de contaminación que generan la mala calidad del aire. Eso sin contar la peligrosidad de las detonaciones que pueden provocar accidentes graves.

Por otro lado, en lo que respecta a los animales, la funcionaria recordó que “en el caso de las mascotas durante Noche Buena y Navidad, hubo varios casos de perros extraviados a causa de la pirotecnia, ahora en Año Nuevo no queremos que esto se repita, la quema de cohetes también afecta a los animales y pone en riesgo su vida, por esto es importante que la ciudadanía continúe haciendo conciencia sobre no utilizar fuegos artificiales”.

De esta forma, la SMADS continúa trabajando en difundir y fomentar una cultura respetuosa del medio ambiente para la protección de la población y de la vida animal del Estado; el respeto y cuidado a la salud y bienestar es responsabilidad de todas y todos.