Con una mezcla de humor, picardía, reflexión y temas de la mujer contemporánea, enmarcados en una extensa colección de géneros musicales, la cantautora Ilse McCarthy derrumbó varios mitos la noche del 5 de septiembre: el espacio del cantautor local no necesariamente es un lugar poblado de sillas vacías.
Sucedió en la explanada del CEARTE, en el marco del Festival del Conocimiento 2024, donde Ilse McCarthy acompañada por Pavel Cortez al piano, Luis Salazar en la guitarra, Ismael Reyes en la batería y Manolo Becerra en el bajo, presentó la colección completa de su primera producción discográfica.
Para inciar y dar la bienvenida al público eligió la balada pop de corte romántico llamada ¨Cara al Sol¨, para continuar con una historia de corazón roto en forma de reggae titulada ¨Game On¨, donde la ironía de la letra recuerda aquello que Shakespeare solía decir: toda tragedia se convierte en comedia cuando pasan algunos años.
Entre las luces intermitentes del escenario siguió con ¨Malas Mañas¨, pieza de pop funk que eligió como nombre para el espectáculo y para el disco; siguió con una pieza a ritmo de blues llamada ¨Toda la Vida¨, donde la participación de los músicos en escena dejó claro que las individualidades pueden destacar sin restar importancia al tema principal.
Como una pausa entre la energía de las piezas anteriores, Ilse McCarthy acompañada sólo por la guitarra eléctrica de Luis Salazar, interpretó una pieza llamada ¨Te perdono¨, para seguir con un clásico hecho famoso por José Jose, ¨Preso¨, pero acompañada en acústico.
El regreso de los músicos fue para interpretar el bolero ¨Deja el Celular¨, donde la protagonista de la canción expresa entre ironías a su pareja como la atención a una pantalla puede acabar con una relación, pues ¨eso de mandar besitos por WhatsApp, amor, eso no alcanza¨.
A este tema siguió ¨Me Sigues Doliendo¨ escrito en coautoría con Cecy Mozz, quien viajó desde la Ciudad de México para estar presente en el estreno de una canción, escrita por dos mujeres cuando descubrieron que el corazón les dolía del mismo lado, explicó Ilse al agradecer la presencia de Cecy entre el público.
Para regresar al pop interpretó ¨Renunciar¨, donde juega con todas las metáforas posibles de un trabajo indeseable, aplicadas a una relación donde la falta de equidad en el interés romántico queda más que clara.
Con ¨El Brayan¨ Ilse se permitió cantar, y rapear en partes, una historia que aunque no propia si bastante cotidiana: el personaje que desaparece de la vida de su pareja luego de que la prueba de embarazo da positiva… ¨¿Y ahora que hago con el pobre Brayancito?¨
El sello de cantautora no podía quedar completo sin rendir homenaje a dos canciones emblemáticas de los ambientes de trova en voz femenina: un arreglo especial en el que los músicos engarzaron ¨Alfonsina y El Mar¨ y ¨Gracias a la Vida¨.
Para finalizar el concierto ¨Quiero Volver¨, una balada que al transformarse en salsa convocó a los presentes a bailar de manera espontánea, primero bajo el escenario y después arriba, junto a la cantante, que no tuvo reparo alguno en decirlo fuerte y feliz: ¡Es mi mamá!
Y si, el público pidió una más y estaban preparados con una versión de ¨La Gata Bajo la Lluvia¨, coreada y aplaudida por el público.
La noche del 5 de septiembre se derrumbaron varios mitos sobre los conciertos de cantautor local: pueden estar llenos, ser disfrutables, bailables y dejar un extraordinario sabor de boca.