Gastos por miles de pesos deben desembolsar las personas que con mayor vulnerabilidad económica, tienen que acudir por una emergencia al IMSS Bienestar, donde no hay insumos y si en cambio un listado de productos que los pacientes deben llevar en caso de ocupar servicios.
Esta situación fue evidenciada por pacientes y por trabajadores que fueron movidos en la transición de Hospital General a sistema IMSS Bienestar y que afectan a alrededor de 700 trabajadores de Ensenada y San Quintín.
Se trata de personal de la Sección 64 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Secretaría de la Salud (SNTSA) afectados económicamente por los cambios que fueron ejecutados por la administración de López Obrador, tras desmantelar el Seguro Popular, donde afectaron el servicio a pacientes y salario de los trabajadores de todos los niveles.
Médicos, enfermeras, y trabajadores afectados expresaron su enojo ante el incumplimiento en el pago de diversas prestaciones, que involucran primas dominicales, vacaciones, pagos trimestrales, lentes y otros beneficios que no han sido liberados por las autoridades correspondientes.
Uno de los problemas más recientes es la división del pago de aguinaldo, que depositaron luego de haber encabezado un paro laboral el martes 19 de noviembre, pero solamente la mitad del monto.
Trabajadores afectados, cuyas identidades se reservan por el riesgo de represalias de las autoridades bajo cuya responsabilidad recae la administración de los recursos donde los fondos no se han liberado, explicó el efecto negativo que esto tiene sobre su economía y la del resto de los trabajadores.
Una de ellas apuntó: “Vengo a trabajar para mantener a mi familia, no para hacer labor social. Exigimos que se nos pague lo que nos deben en el momento que corresponde”, dijo.
Además de los pagos atrasados, los trabajadores denuncian la falta de material y equipo adecuado en el hospital, pues según indican, los pacientes que llegan a urgencias o a consultas ginecológicas deben traer sus propios suministros.
Entre los artículos que se les piden a los pacientes están sábanas y material para procedimientos quirúrgicos, lo cual genera a los que solicitan atención un gasto adicional de entre 3 y 5 mil pesos por paciente que no cubre IMSS Bienestar.
Los trabajadores también han alertado sobre las condiciones precarias en las que se encuentra el hospital, mencionando la escasez de materiales esenciales, como papel sanitario y productos básicos para la atención de los pacientes.
En este contexto, las protestas se han convertido en una medida urgente para visibilizar las carencias y exigir soluciones inmediatas.
Esta situación se da con la complacencia de su líder sindical, Crispín Tlatempa Martínez, quien aseveran, no ha brindado una respuesta clara y por ello el descontento ha crecido y los trabajadores afectados han anunciado la posibilidad de realizar un paro total de labores, como se ha hecho en otros estados del país, si no se cubren los adeudos como corresponde.