La creciente problemática de los animales en situación de calle no recae únicamente en las autoridades gubernamentales, sino que es una responsabilidad compartida con la sociedad: Los dueños de perros, gatos y otras mascotas deben asumir un papel activo para mitigar este problema, que se ha convertido en una cuestión de salud pública.
Marisol Montaño, activista y presidenta de la asociación civil Hagamos Conciencia, ha señalado el alarmante aumento de perros y gatos en las calles, muchos de los cuales padecen enfermedades como roña, infestaciones de garrapatas y pulgas, que pueden ser transmitidas a los humanos.
En redes sociales, se han visto múltiples discusiones sobre la irresponsabilidad de algunos dueños que, a pesar de tener mascotas, no toman las medidas necesarias para su cuidado. Comentarios en plataformas como Reddit reflejan la frustración de ciudadanos que han sido testigos de situaciones peligrosas relacionadas con animales sueltos.
"Diariamente observamos la intervención de la perrera municipal; sin embargo, el problema persiste. Aunque se implementan programas de adopción, también hay una notable irresponsabilidad por parte de aquellos que abandonan a estos seres vivos en las calles, permitiendo su reproducción y agravando la situación", expresó Montaño.
Este sentimiento se ve respaldado por testimonios en redes donde se denuncia el abandono y maltrato hacia animales, así como la falta de acción por parte de sus dueños.
Recientemente, un incidente en Mexicali destacó la gravedad del problema: un hombre fue gravemente herido tras ser atacado por una jauría de perros callejeros.
Este no es un caso aislado; Montaño recordó que meses atrás una mujer perdió la vida en circunstancias similares. "No es la primera vez que escuchamos sobre tales incidentes; hay numerosos casos en otras ciudades", lamentó.
La activista también subrayó que existen programas accesibles de esterilización y vacunación, muchos de ellos gratuitos o a bajo costo, sin embargo, enfatizó que no todos los ciudadanos asumen su responsabilidad. "Es crucial que todos nos involucremos en un problema del que nos quejamos pero no cambiamos", afirmó Montaño.
Además, mencionó que muchos animales callejeros mueren atropellados, lo que representa otro desafío para la salud pública, pues la falta de acción para retirar los restos de estos animales genera olores desagradables que afectan a quienes transitan cerca.
En redes sociales, se ha discutido cómo esta situación no solo afecta a los animales sino también pone en riesgo a las personas.
Finalmente, Montaño propuso establecer un programa para censar a los animales en situación de calle con el fin de dimensionar el problema y considerar sanciones más severas por maltrato o abandono animal.
"El abandono es un delito", concluyó, instando a la sociedad a tomar conciencia y actuar ante esta creciente crisis.