Este chiste me lo contaron ayer... dice: Van los candidatos presidenciales, Calderón, Madrazo, el Peje, Patricia Mercado y Campa en un avión y entran en una zona de turbulencia por lo cual el avión se estrella. ¿ Quién se salva?...R: El País.
El chiste da risa y ganas de llorar porque es cierto, nunca como ahora la caballada había estado no flaca sino escuálida y lastimosa.
Si no me lo cree, hay le va
Calderón y el PAN, son en la actualidad una versión corregida y aumentada del PRI, aprendieron demasiado rápido lo que siempre criticaron, y si usted quiere ver lo que le espera a México si el PAN gana de vuelta en el poder, de una revisada al PAN de Baja California.
Uso de recursos públicos para campañas, nepotismo, amiguismo, corrupción, ineficiencia, y aires de sultán de algunos de los funcionarios, amén de que son funcionarios permanentemente encampañados o arreglándole el camino a alguien, como en el Viejo PRI desde una oficina gubernamental.
Corrupción y nepotismo los hijititos de Martha como uno de los ejemplos de este sexenio sin contar todos los demás que sepa usted y que en el Estado tiene un montón de ejemplares.
Luego está el PEJE, Un priísta resentido, amigo de exfuncionarios priístas y perredistas del Distrito Federal que pasarán a la historia por el videoescándalo de los billetes y las ligas o por otros rollos de corrupción a cual más de graves.
Asustan las promesas del Peje que como Santa Claus dice que va comprar, hacer, poner, construir y dar, pero no ha dicho de donde lo va sacar. A esto se suma sus amenazas veladas para todos los que no piensan como él.
Luego esta Madrazo, otro, no sabes si igual de peor o más peor, pero cuyo paso como Gobernador de Tabasco no estuvo marcado precisamente por la honestidad y la decencia, dos términos que en el 2006 suenan cursis, pero que como le servirían a los partidos políticos y sus miembros, especialmente los que además de militar en partidos son funcionarios.
Estos tres candidatos los que más suenan y más posibilidades tienen, se han portado desde el inicio de las campañas como bravucones.
Se han dedicado a denostar, a insultar, a retar, pero no han propuesto, planteado, mostrado el que van a hacer, como lo van a hacer, porque lo van a hacer y de donde van a obtener recursos para hacerlo sin endeudar a México y destruir lo avanzado.
Para quienes vivimos las devaluaciones en la frontera, un presidente populista como Jolopo o Echeverría no es cosa de juego.
Para quienes hemos observado, como países de Latinoamérica han sufrido un retroceso por causa de un Dictador, el escenario no nos gusta.
Para quienes hemos visto el saqueo desvergonzado de los amigotes del presidente tampoco nos agrada tener un ladrón al frente.
Tampoco nos interesa tener mucho trato con la Iglesia, salvo que recen por nosotros, pero no se metan en política.
Los otros dos candidatos, no tienen la menor esperanza, y entonces, ese es el panorama a cuatro meses de una elección donde en lo que a mí respecta, por primera vez en mi vida no hay nada que me guste, ni siquiera tantito.
P.D. ¿Cuanto costará un avión?