El 14 de julio fue anunciado por militares la detección de un gigantesco cultivo de marihuana en una siembra de alrededor de 129 hectáreas cuadradas que equivaldría al terreno que ocuparían 8.5 Macroplazas del Mar.

La inusual siembra fue localizada por personal del Ejército Mexicano al sur de la Delegación de El Rosario, a 300 kilómetros al sur de Ensenada en Baja California, casi a pie de carretera en el kilómetro 141 tramo El Rosario-Cataviña.

El cultivo visible con Google maps, y propiedad presuntamente de “El Chapo Guzmán” fue detectado por casualidad por los militares en una de las zonas mas despobladas de la península.

En el campamento se capturó a 57 personas quienes presuntamente trabajaban como jornaleros en el lugar las cuales fueron arraigadas desde esa fecha y liberadas días antes de navidad bajo fianza.

El plantío de droga constaba de un campamento con un sofisticado sistema de riego y energía para extraer agua de dos pozos en una de las zonas más inhóspitas del país.

Es de acuerdo a los datos oficiales, el más grande que se ha localizado en México mismo que fue usado por la milicia para llevar a reporteros de distintos lugares del país para presumir el descubrimiento.

Según reportes posteriores de medios de comunicación los jornaleros que trabajaban en ese lugar fueron traídos desde Sinaloa con engaños a siembras de fresa y tomate y al llegar vieron que era marihuana, pero por ubicarse en medio del desierto no pudieron huir.

Asimismo se dice que en al menos tres ocasiones “El Chapo” visitó su propiedad a la que arribó por vía aérea sin ser descubierto.

Residentes de la zona aseveran que el lugar desde que empezó a construirse fue resguardado por personas fuertemente armadas, pero nunca fueron molestadas.

Actualmente el gobierno del Estado busca que el predio pase a sus manos mediante el sistema de extinción de dominio para aprovechar la infraestructura en cultivos lícitos.