Detalló que la última regata se llevó a cabo en el mes de abril del presente año en donde al menos 60 veleros regresaron a su país de origen el mismo día sin que los tripulantes descendieran de las embarcaciones para consumir en Ensenada lo que merma de manera directa la recuperación económica.

Chávez Montaño precisó que cada nave se encuentra tripulada por al menos ocho personas y durante la pasada regata participaron alrededor de 112 equipos, por lo que al menos se contó con la asistencia de 1 mil personas.

En este sentido, subrayó que al menos quinientos navegantes decidieron no bajar de sus navíos debido al impuesto que se cobra por parte del Estado que consiste en 38 dólares por persona un equivalente a 785 pesos mexicanos, por lo que cada equipo debe de pagar alrededor de 300 dólares o 6 mil pesos mexicanos.

El Titular de CANACO en Ensenada, aseveró que para muchos de los participantes la medida no parece justa ya que en su totalidad el gobierno del estado se llevaría una ganancia de 19 mil dólares solo por los participantes que deciden no bajar, en el caso de que todos bajaran de sus embarcaciones la ganancia del ejecutivo estatal sería de 680 mil pesos.

Por lo anterior, es que muchos de los equipos también han optado por dejar de participar en un evento que cuenta con 75 años de trayectoria, en el caso de que los 60 equipo inconforme dejaran de participar la competencia de cancelaria, afirmó Rafael Chávez.

De igual manera, aseguró que es más la afectación que el beneficio que obtiene el gobierno del estado al cobrar dicho impuesto ya que las quinientas personas representan al menos 250 habitaciones ocupadas, 500 comidas, 500 bebidas que no se vendieron.

A esto se suma que muchos de los competidores traen a sus familias por tierra personas que también dejarían de asistir si se retiran de la competencia, mientras que el espectáculo que es gratis se acabaría, finalizó.