Como se informó con oportunidad, la mañana del domingo 23 de junio, Bianca Pérez, fue localizada muerta entre matorrales y dunas del área de la Lagunita, a donde fue llevada mediante engaños por su expareja Joshua Okniel “N” de 19 años de edad.

Bianca de 20 años de edad, tenía poco que había sido madre por segunda vez, su bebé apenas tiene 10 meses y su hija poco más de tres.

Joshua, su expareja, tenía, de acuerdo a la hermana de la víctima Ashley Pérez un historial de violencia y según sus declaraciones, existían al menos dos denuncias penales en su contra por agresiones en contra de Bianca, una de las cuales involucraba además a la familia del presunto feminicida.

El día de su muerte, el sábado 22 de junio por la noche recibió una llamada de su ex, el cual tenía a la hija de ambos donde le indicó que podría ver a la pequeña. Fue la última vez que vieron a Bianca con vida.

Presuntamente tras llamarla por teléfono, Joshua la llevó con él a la zona conocida como El Punto en la playa cercana al CONALEP y en ese sitio tras una discusión, la estranguló. El cuerpo fue hallado a la mañana siguiente.

Ashley, su hermana, explicó que si bien el presunto feminicida está en proceso penal y encarcelado desde finales de junio cuando fue detenido, quieren que sea sentenciado lo más pronto posible y den información concreta de los avances a la madre de la víctima.

Asimismo que se considere como agravante el hecho de que el presunto homicida Joshua Okniel “N” le había propinado en distintas ocasiones golpizas una de estas cuando ella estaba embarazada.

En los conflictos que tuvieron como pareja, él la despojó de la hija, sin precisar si hubo algún proceso de por medio, asimismo negaba la paternidad del segundo bebé.

En este caso la familia tiene una abogada de oficio que les ha indicado que se trata de un proceso largo, pero les ha dicho que a ella tampoco le han dado información. Lo que piden es que el crimen mediante el cual dos pequeños fueron dejados en la orfandad, no quede impune.

Las activistas que la acompañaron reclamaron que es necesario que la madre y la familia de la víctima reciban atención psicológica como víctimas indirectas de este crimen.

“Sí hay una abogada que trabaja en la fiscalía que les ha dicho que hay un proceso de investigación que ocupa unos tres meses, luego viene otra fase más extendida para recabar pruebas, para elaborar el juicio. Sí se ha explicado eso, sin embargo, aunque no podíamos hablar de temor, sí estamos hablando de que no ha habido un proceso expedito y transparente con la familia directamente”.

Agregaron: “A la mamá de Bianca, que es la única que debe acceder a la copia, a la carpeta de investigación, no se le ha entregado. Estamos hablando de que a tres meses no se le ha entregado la copia, ni se le ha dado ningún informe. Y el único trámite que ha hecho, porque en su momento se le da esa información, fue el de reparación de daños para reembolso de gastos funerarios, pero no se le ha dado ese reembolso”.

Respecto a la atención psicológica, es una garantía que debe dar la fiscalía, ni asesoramiento jurídico como tal, para todo el proceso. También por eso quisimos acompañar a la familia hoy para exigir las dos cosas. Como no ha habido, disculpa, transparencia y momentos precisos, muy expeditos, sí necesitamos asegurarnos de que va a haber un proceso justo.

La hermana de Bianca, explicó que su hermana fue usada por la familia del presunto homicida. “Mi hermana mantenía toda la familia del muchacho. Mi hermana era la única consciente ahí, no sé qué vida tenga el muchacho, no sé qué vida le hayan dado, no sé, realmente yo no sé mucho de él ni de la familia, pero lo que sí sé es que si la golpearon embarazada, embarazada la golpearon, lo que fue miembros de la familia de él, incluso él la golpearon, mi hermana fue porque los denunció. Entonces no ha procedido esa, denuncia”. Finalizó.

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