Los pasados latrocinios Al final, la lucha descarnada por el poder, abreva de un solo elemento, la permanencia de las canonjías. La política en México parte de una obviedad, enriquecerse lo más rápido posible con el menor esfuerzo. Un régimen tiene que negociar la victoria de otro régimen de distinto color. Un cambio de timón brusco supondría un descalabro mayúsculo para todos los involucrados en las negociaciones subterráneas. En el fondo, se desea que lo que se proteja sea el latrocinio, en curso, o ya consumado. Las leyes de la inmediatez política permiten la laxitud en la observación de la ejecución de los recursos públicos.
Nota publicada el 5 de mayo de 2017