Residentes de San José de la Zorra, una de las pocas comunidades de indígenas nativos de Baja California, pertenecientes a los Kumiai, enfrentan desde hace tiempo un conflicto producto del absurdo y el desconocimiento que en materia geográfica, mantuvieron legisladores al establecer los límites de Ensenada.
La comunidad que históricamente siempre perteneció a Ensenada fue recortada del mapa e incluida en Playas de Rosarito con una serie de consecuencias que afectan a 219 pobladores de San José de la Zorra indicó María de los ángeles Carrillo Silva, autoridad tradicional de la comunidad Kumiai de San José de la Zorra.
La redelimitación de municipios, los afectó cuando en la redistritación electoral, fueron incluidos por cuestiones geográficas, como parte de un distrito de Playas de Rosarito, lo que aparece en la credencial electoral de los habitantes Kumiai.
La comunidad de San José de la Zorra, se encuentra al Norte de Ensenada entre el Ejido Ignacio Zaragoza y el Ejido Primo Tapia, con apenas 219 residentes, estos habitan en casas distribuidas entre cerros y cañadas a las que se tiene acceso por un camino de terracería. Pertenecen a la tribu Kumiai.
El impacto ha provocado tiene que ver con trámites que desde siempre se habían realizado en el municipio de Ensenada ahora tienen que ser en Playas de Rosarito.
Con Ensenada, la distancia es más corta porque a él pertenecían, pero ahora de acuerdo a los datos en la credencial, ya no les corresponde.
Pero no solamente eso, cuando se han registrado para algún apoyo o proyecto les dicen que no pertenecen al municipio de Ensenada y en Rosarito que tampoco pertenecen a ese municipio y los mandan de regreso a Ensenada.
Para votar es otro problema, en la última elección los Kumiai de San José de la Zorra, no pudieron votar. “No votamos porque nuestra casilla la movieron a Santa Anita y no se pudo dar con la ubicación”.
Aclaró: “Siempre votamos en el Ejido el Porvenir y ahora nos mandaron al Descanso lo que es un grave problema por la distancia”.
El tema ha sido puesto sobre la mesa, ante el Instituto Nacional Electoral pero les aclararon que es un asunto que debe resolver el Congreso del Estado, porque ellos fueron los que movieron los límites.
Asimismo se ha planteado con Diputados y con el INE para indicarles que no están de acuerdo, porque no fueron consultados y simplemente desde una oficina sin saber que hacían los pusieron donde les dio la gana y no les dieron ninguna opción.