La Secretaría de Agricultura y Desarrollo Rural, reporta que en la modalidad de riego, se sembraron 3 mil 186 hectáreas, lo que representó un cumplimiento del 79 por ciento, con relación a las 4 mil 028 hectáreas programadas para este ciclo.

Las siembras de este ciclo estuvieron encabezadas por el cultivo de la fresa, con una superficie de 2 mil 834 hectáreas. La fresa se cultiva, en su mayoría, en los campos productivos del Municipio de San Quintín, y en menor proporción en Ensenada. La producción de dicho fruto rojo se da a través del esquema de Agricultura Protegida (invernaderos y mallas sombra) y a cielo abierto.

En adición al fruto, también se sembraron 18 hectáreas de calabacita, 3 hectáreas de chícharo, 2.5 hectáreas de tomate y 328.5 hectáreas con cultivos varios, principalmente hortalizas.

Se incrementaron siembras de temporal

La Dependencia Federal resaltó que las siembras del otoño-invierno, pero en la modalidad de temporal se incrementaron en un 18.38 por ciento con el establecimiento de 7 mil 807 hectáreas, de un programa inicial de 6 mil 595 hectáreas.

Destacó que dicho aumento se debió, principalmente, a las lluvias que se registraron entre los meses de diciembre del 2023 y enero-febrero del 2024, las cuáles superaron los 187 milímetros en el Municipio de Ensenada, según datos proporcionados por la Comisión Nacional del Agua (Conagua).

En esta modalidad, sobresalió el cultivo de la avena con 3 mil 905 hectáreas; seguido de la cebada con 3 mil 595 hectáreas, el trigo con 300 y los cultivos varios con 7 hectáreas. El destino de la producción de estos forrajes, es para consumo animal y en algunas ocasiones, dependiendo de la calidad del producto, se deja para semilla, para los siguientes ciclos agrícolas.