Los muertos que no descansan en Paz
Historias de testamentos, envenenamientos y desapariciones.

Por: Elizabeth Vargas Durazo

Cuando no hay un cuerpo a quien llorar

La presunción de muerte

Ahogados, calcinados, enterrados clandestinamente, muertos en batalla, secuestrados… en una palabra: desaparecidos. Hechos distintos pero con un resultado similar donde en algún momento, los familiares deberán precisar situaciones para obtener un acta de defunción y seguir adelante.

 

¿Qué es la presunción de muerte?

 

Rocío López Gorosave, Juez del Registro Civil, explica que la presunción de muerte es cuando una persona desapareció bajo alguna circunstancia y sus familiares presumen que falleció.

 

En el artículo 697 de la Ley Civil se indica que deben de transcurrir dos años desde la desaparición de un individuo: en una guerra, en un buque, explosión o incendio, para que se presuma la muerte.

 

Luego por la vía judicial se lleva un proceso y es un juez el que ordena que se registre y entregue el acta de defunción a los deudos

 

Uno de los casos vigentes es de los náufragos del 28 de febrero del 2012 de la Cooperativa Nacionales de Abulón, pues quienes viajaban de Punta Eugenia a Isla de Cedros naufragaron y sus cuerpos no aparecieron.

 

En casos como este deben de pasar dos años antes de que se declare la muerte y se tenga acceso al acta de defunción.

 

En otros casos, como el de personas que se reportan extraviadas pero nunca se sabe su paradero, son seis años los que deben de pasar y el trámite debe hacerse mediante declaración de ausencia por la vía judicial.

 

Son casos raros, contrario a lo que algunas personas piensan, de hecho del 2010 a la fecha hay tres casos donde se presume la muerte de una persona, por la ausencia de un cuerpo.

 

De ese tiempo a la fecha se tienen en el Registro Civil de Ensenada solo tres trámites para obtener un acta de defunción, situación que exige un proceso judicial en donde será un Juez quien ordene levantar el acta.

 

En muchos otros casos, la familia mantiene la esperanza de que su familiar siga vivo y tardan años en efectuar el reclamo de un acta de defunción o nunca lo hacen.

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